Un puesto de comida rápida al estilo romano antiguo fue descubierto en Pompeya, la ciudad que desapareció enterrada con sus habitantes por la erupción del Volcán Vesubio en el 79 d.C.
Los arqueólogos hallaron el termopolio o negocio de comida callejera en Pompeya en una parte del sitio que no estaba abierta al público e incluye el descubrimiento de restos de alimentos de casi 2000 años de antigüedad en algunos frascos de terracota.
El termopolio era el lugar en el que se servía comida a las clases más bajas de la ciudad y los envases encontrados con restos de alimentos apuntan al origen de la “comida para llevar”, señalaron los arqueologos.
Se sabe que los pompeyanos tenían por costumbre consumir comestibles y bebidas al aire libre, alentados por el clima del apacible golfo de Nápoles. En los termopolios, como indica su nombre de origen griego, se podía consumir alimentos y bebidas calientes que se conservaban en grandes tarros, denominados dolia, que estaban incrustados en el mostrador de mampostería.
Massimo Osanna, director del sitio arqueológico, dice que es la primera vez que se desentierra un puesto de comida callejera completo. Además será de gran importancia para saber qué tipo de comida preferían los hombres y mujeres de a pie en Pompeya.
¿Cómo era el puesto de comida rápida del año 79 hallado en Pompeya?
El frente del mostrador está decorado con coloridos frescos, algunos de los cuales representan las carnes que se ofrecen.
Los responsables del sitio destacaron la decoración con temáticas muy coloridas y su estado de conservación, al que definieron como «excepcional».
En la decoración destaca la imagen de una nereida (ninfa) a caballo en un entorno marino. Otros frescos representan animales, como un gallo, o un pato, de colores brillantes.
En los trabajos arqueológicos también encontraron una ilustración similar a un letrero comercial de la tienda y diferentes objetos de despensa y de transporte: nueve ánforas, un recipiente en bronce, utensilios de cocina, dos frascos y una olla de cerámica.
Además de pinturas, los científicos encontraron restos alimenticios en los huecos de la mesa que podrían aportar valiosa información sobre las costumbres gastronómicas en Pompeya en la época en que fue cubierta completamente por la erupción del Vesubio, en el año 79 de nuestra era.
En las pinturas también se cuenta la de un perro, en la que se aprecia una inscripción que define el humor escatológico de la época: NICIA CINAEDE CACATOR (Nicia es un cagón), probablemente un insulto al dueño del negocio.
¿Qué vendía el puesto de comida callejera de la antigua Roma?
El mostrador, conservado por las cenizas volcánicas, había sido parcialmente desenterrado en 2019, pero los trabajos se extendieron para intentar preservar lo mejor posible todo el sitio arqueológico, ubicado en un barrio muy concurrido.
El esfuerzo y tiempo valió la pena, pues permitió recuperar restos de alimentos que permiten responder a la pregunta ¿qué comían en los puesto callejeros de la antigua Roma? Este termopolio vendía pato, cerdo, cabra, pescado y caracoles en recipientes de barro.
Fragmentos de dichos alimentos se hallaron en los trabajos arqueológicos. Además, en el fondo de una botella aparecieron habas molidas, que según los estudiosos, se utilizaban para modificar el sabor y blanquear el color del vino.
Los termopolios eran muy comunes en el mundo romano. Solo en Pompeya había unos 80.
Restos humanos también fueron hallados junto al puesto de comida rápida
Otro dato interesante es que en la misma sala, detrás del mostrador, se han descubierto también huesos humanos de víctimas de la violenta erupción del Vesubio.
En este caso, a diferencia de la gran cantidad de cuerpos perfectamente conservados que han emergido a lo largo de los siglos, los restos están gravemente dañados por el paso de excavadores clandestinos que durante el siglo XVII expoliaron el yacimiento en busca de objetos de valor.
Los expertos creen que los huesos pertenecen a un individuo de unos 50 años que estaba tumbado, probablemente en una cama, cuando llegó la terrible colada piroclástica que arrasó la ciudad.
Datos de Pompeya
Pompeya albergaba a unas 13 mil personas cuando fue enterrada bajo las cenizas.
Las ruinas de la ciudad fueron descubiertas en el siglo XVI, con excavaciones organizadas a partir de 1750. Desde entonces, se han descubierto alrededor de dos tercios del sitio, y Pompeya es ahora una de las atracciones más populares de la Italia moderna.
Hasta ahora, solamente un tercio de la ciudad ha sido desenterrado, y es el segundo lugar más visitado de Italia tras el Coliseo romano.